Este Blog, nace inspirado en un artículo del mismo título, publicado por Paco Muro, Consejero Delegado de Otto Walter para España y Portugal, en el año 2003.

martes, 23 de agosto de 2022

Algún día

Algún día vendrán a tu cabeza las palabras de muchas conversaciones  mantenidas. Algunas frases que ahora prefieres no escuchar o simular que no las escuchas, a las que no das importancia. Frases que he debatido conmigo misma si decirlas o no. Como madre he sentido la necesidad de decirlas, a veces algo herida y otras sólo porque debía hacerlo.  Algún día volverán a ti y sólo entonces te darás cuenta de que no existen manuales para criar a los hijos. Nos movemos por sentido común, con errores y aciertos,  pero siempre creyendo firmemente que lo dicho o decidido es lo mejor para ti.  De esa frustración momentánea han nacido ganas de lanzar la toalla. También han nacido debates internos y la mayoría de veces ganó el correcto pero seguro que otras lo ganó el orgullo o el desánimo. Callar cuando ves algo tan claro no es fácil. La experiencia es un grado para lo bueno y para lo malo. Pero tu hermetismo, tu falta de espontaneidad y ganas de compartir, tu barrera natural en muchas conversaciones, tu poca presencia  en tantas situaciones, hacen más duro llevar esa experiencia como grado . Porque el tiempo es lo único que no podemos recuperar y a veces es demasiado tarde, aunque el dicho diga que no. Lo es para recuperar los besos no dados, el cariño no mostrado, el amor no verbalizado.  Esos momentos pasan y no vuelven jamás. 


Algún día serás consciente de esos momento no aprovechados, en los que estando juntos estabas tan lejos, conectado a conversaciones “importantes” de movil con amigos pero tan desconectado de quien rodeaba la mesa contigo. La familia se cuida estando presente,  hablando o sin hablar, pero estando cien por cien presente en la cercanía y en la distancia.


Algún día  sabrás que para que te tengan en cuenta, has de tener en cuenta. Sabrás que los detalles marcan la diferencia entre la presencia y la ausencia. Sabrás que la intención y la atención son necesarias para que el otro sepa que estás ahí. El amor es de ida y vuelta, y el que no se da no se sabe, ni parece existir. 


Algún día tendrás tu propia familia y todo estos sentimientos que provocas sin querer, los vivirás en tu propia carne. Tal vez entonces entenderás tantas cosas, aunque el tiempo no vuelva  ni puedas recuperarlo. 


Algún día fiel a ti mismo descubrirás que no hace falta mucho para hacer feliz a quien quieres. Algún día tendrás que cuidar tu, y entonces vendrán a ti momentos, conversaciones y algunas frases que no entendiste. 

Algún día espero vivirlo contigo para que la tristeza  no te envuelva, e igualmente sabrás que seguimos ahí queriéndote como si lo hubieras descubierto al principio. A veces es el único camino a recorrer por mucho que desde la experiencia intentemos evitarlo.